miércoles, 2 de diciembre de 2015

Libros recibidos 31


            La Institución “Fernando el Católico” nos ha donado una serie de libros editados por diferentes entidades, todos ellos de indudable interés. El primero de los que reseñamos es la obra de Alfonso García de Paso Remón y Wifredo Rincón García, dedicada a La iglesia parroquial de San Gil abad de Zaragoza. Publicada por Elazar Ediciones en 2014, es un libro lujoso con excelentes fotografías de Andrés Ferrer, dedicado al párroco D. Mario Gállego Bercero, con motivo de sus Bodas de Oro sacerdotales. Tras un capítulo dedicado a la figura del santo titular, se relata pormenorizadamente la historia del templo, para finalizar con un detallado estudio de su exorno artístico en la actualidad.





            Otro libro de gran formato y excelente presentación es el que lleva por título. Andrés Ferrer. La luz amarga. Editado por el propio autor, con la ayuda de diversas instituciones, reúne una serie de fotografías que tienen por tema la antigua azucarera de Épila. Va precedido por unos estudios de Daniel Canogar, Javier Larraz y Enrique Carbó, sobre el autor y la contextualización de su trabajo. Aunque en la portada aparece una referencia a Épila, quizás hubiera sido conveniente que, de manera más explícita, se hiciera referencia al marco en el que se ha desarrollado el trabajo, la antigua azucarera abandonada.



            La Asociación Cultural del Matarraña, que tiene su sede en Calaceite, publicó en 2013 como número 1 de su colección L’Aladre, la obra que lleva por título Queretes. La col.lectivització d’un poble aragonés durant la Guerra Civil (1936-1938), del que son autores los historiadores suizos Encarnita y Renato Simoni. Es la traducción de la obra origina, publicada en italiano en 2006 con el título Cretas. Autogestione nella Spagna republicana (1936-1938), gracias al cual hemos podido percatarnos del significado correcto de la palabra Queretes. Al igual que en ese caso, nos ha resultado llamativo encontrar traducidos los nombres de Tarazona (Tarassona), Ejea (Eixea), Huesca (Osca), Teruel (Terol) o Zaragoza (Saragossa), entre otros. Al mismo tiempo, hemos podido saber que Borja, por el momento, no la tiene pues sigue siendo denominada “Borja”. No es el caso de Valderrobres que cuesta identificarlo con “Vall-de-roures”, aunque sus habitantes utilizan esa versión. Este fenómeno se ha dado siempre con los idiomas en expansión, razón por la que, en el pasado, se tradujo London por Londres, New York por Nueva York y algunos otros casos.



            El Centro de Estudios Políticos y Constitucionales publicó en 2012 la obra Emigrados. España y el exilio internacional, 1814-1834, tesis doctoral de su autor Juan Luis Simal, con la que obtuvo el Premio “Miguel Artola” para tesis sobre Historia Contemporánea. En la obra analiza los diferentes exilios que tuvieron lugar en el período estudiado, desde el de los liberales y afrancesados, tras la guerra de la Independencia hasta el provocado por las revoluciones de 1830.

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